El Tribunal de Ética y Disciplina del Colegio de Abogados es el órgano encargado de velar por el ejercicio ético de la profesión, a la luz de considerar que la abogacía tiene una función social al servicio del Derecho y de la Justicia. El Tribunal ejerce un rol jurisdiccional que le impone aplicar sanciones a los letrados que incumplan alguna de las normas de conducta establecidas en la Ley 5233 de Ejercicio de la Abogacía o el Reglamento Interno del Colegio, para lo cual desarrolla un procedimiento previsto a esos fines en la mencionada normativa, procurando asegurar el ejercicio de la legítima defensa de los colegiados denunciados.
El Tribunal está compuesto por tres miembros titulares: Juan Pablo Torres (presidente), Germán Müler (vicepresidente) y Esteban Padilla (secretario) y cinco suplentes: Mónica Almasán, Francisco Moya, Gabriela Saade, Horacio Bliss y Nuria Ribo. Los cargos son electivos y se renuevan íntegramente cada dos años, período de duración del mandato.
Los integrantes de la actual composición basan su labor en el convencimiento de que la principal función del cuerpo debe ser preventiva, ya que el ejercicio leal y ético de la profesión no sólo permite un desarrollo más adecuado de la profesión, sino que también colabora con un mejor desarrollo del servicio de justicia y la pacificación social. A esos efectos redobla sus esfuerzos por propender a una solución célere de los conflictos puestos a su consideración.
El Tribunal está generando un espacio de difusión de las normas éticas, para colaborar en la formación de abogados más conscientes de su rol y sus obligaciones. Del mismo modo, trabaja en el desarrollo una base de datos de sus decisiones y criterios, para garantizar a los letrados su conocimiento y generar seguridad jurídica y transparencia.
